Una historia contiene muchos de los elementos que están en un libro o en una película. Estos mismos elementos tienen un propósito similar si se cuenta una historia para vender un producto.

Los personajes son los clientes, el conflicto es la dificultad del cliente, luego el camino para resolver el problema y la resolución del problema y el lanzamiento de la marca.

El storytelling en ventas es muy beneficioso, ya que no hay reglas y se puede escribir cualquier cosa que llame la atención de los clientes y que les anime a probar y comprar el producto ofrecido.

El storytelling en las ventas


Es un hecho que las personas no quieren que se les venda un producto de manera directa. Ahora es indispensable crear una conexión con ellas, tocar sus emociones y luego brindar soluciones efectivas a sus problemas, por medio de servicios o productos.

Las empresas y las marcas tienen algo que contar y pueden construir historias. El secreto está en cómo contarlas para llegar al público que se quiere y de verdad conectar con las emociones de quienes escuchan, observan y siguen la trayectoria de una marca.

Las historias contadas de manera correcta, sean alegres o tristes, son conmovedoras y dejan huella porque despiertan emociones.

Lo mismo sucede con las historias contadas por las compañías con la intención de vender. Están hechas para tocar los sentimientos de los clientes y por eso el storytelling en ventas, es una técnica que trae muchas ventajas y beneficios.

Claves para incrementar las ventas con el storytelling


Los clientes aprecian más a las marcas por sus historias que por los productos que
comercializan, por eso es importante saber cómo hacer un storytelling para construir una estrategia exitosa.

Establecer el público a quién se dirigirá la historia


Una historia no tiene que gustarles a todos y tampoco debe dirigirse a cualquier tipo de público, porque el mensaje de la misma no llegará a todos del mismo modo.

Por eso, antes de comenzar el proceso de contar una historia, hay que pensar en el nicho ideal, en lo consumidores a los que debe dirigirse el storytelling.

No es igual vender un producto a un joven de 20 años que a un niño de 10 años. La manera de ver las cosas son diferentes y, por ende, la historia debe adaptarse a la realidad de cada quien.

Definir el objetivo de la historia


Antes de crear una historia, hay que plantear varias preguntas, por ejemplo:

  • ¿Quiero posicionar mi marca?
  • ¿Quiero presentar un producto/servicio?
  • ¿Deseo generar engagement con el público?

¿Quiero educar a los consumidores respecto a un tema de sensibilidad social? Aunque la estructura del storytelling tiene como finalidad el aumento de las ventas de un producto, ese no debe ser el mensaje. Hay muchas intenciones y la historia contada debe tener un contenido valioso.

Entender a los consumidores


Este punto es complicado, ya que puede generar confusión. No es lo mismo comprender las necesidades de los consumidores en cuanto a un producto, que entender cuál es la forma adecuada para conectar con sus emociones.

Aumentar las ventas por medio del storytelling puede ser rápido, pero la construcción del mensaje que tendrá la historia puede tardar mucho tiempo, si no se sabe cómo conectar con el público.

Respetar las etapas de una historia


Las etapas o estructura del storytelling deben ser contadas en la historia y dependiendo de la misma, no importa el orden en que se encuentren. Estas etapas son:

  • El punto clave: es el porqué de la historia.
  • La premisa: es el comienzo de la historia.
  • La complicación: las dificultades del personaje.
  • La encrucijada: el clímax de la historia.
  • El desenlace: el final de la historia.